Dra. Arabella Michelén
Envejecer no significa perder la magia de la sonrisa. Al contrario, mantener una buena salud oral en la tercera edad es fundamental para la calidad de vida, alimentarse bien, comunicarse con facilidad, la autoestima y socializar con amigos y familiares. Sin embargo, muchas veces se subestima el cuidado oral en esta etapa, lo que acarrea molestias físicas y mentales.
Con los años, es común que los dientes se desgasten, las encías se retraen, disminuye la producción de saliva, aparezcan problemas como la sensibilidad. Sin embargo, esto no justifica que se padezca de enfermedad periodontal, caries, halitosis, y pérdida de dientes.
Siempre debe tenerse muy pendiente que el norte para disfrutar de buena salud oral se encamina en:
- Correcta higiene: cepillado oral, al levantarse y después de cada comida, uso del hilo, enjuague, así como cualquier otro aditamento recomendado por el doctor. Es propicio recordar que con los años se pierde destreza motora, probablemente el paciente va a sustituir su cepillo manual por uno eléctrico, tal vez usara un irrigador; excelente. Si llegara a necesitar ayuda de otra persona debe proveérsele, así como se hace en otras áreas de la salud.
- Alimentación balanceada y acorde a su salud general. Recordemos la boca es parte del cuerpo, por lo tanto, guarda una íntima relación con las enfermedades sistémicas.
- Visitas periódicas al dentista. Es importante en esta etapa contar además del dentista cabecero con un periodoncista.
La ciencia y la tecnología avanzan a un ritmo muy acelerado y esto beneficia al profesional de la salud con la atención a personas mayores, aún con limitaciones físicas y mentales. Algunas de las opciones más útiles son:
- Implantes dentales, que permiten reponer dientes de forma fija y funcional.
- Consultas accesibles y clínicas adaptadas, cada vez más enfocadas en la atención al adulto mayor.
- Fototerapia: la luz terapéutica aplicada a la cavidad oral ayuda a reducir inflamación, dolor y acelerar la cicatrización.
- Uso de Odontologia digital: evitando las molestas impresiones análoga, tiempo de realización de prótesis disminuidos, menor número de visitas, en ocasiones, incluso se puede realizar desde el hogar.
Ventajas de mantener una buena salud oral en la ancianidad:
- Sana nutrición: masticar correctamente permite disfrutar de una dieta variada.
- Menos enfermedades sistémicas: Las infecciones bucales pueden influir en enfermedades cardiovasculares, diabetes y problemas respiratorios, entre otras
- Bienestar emocional: Una sonrisa funcional y estética favorece la autoestima y las relaciones sociales.
- Mayor comodidad: Evitar molestias como el dolor, el mal aliento y permite disfrutar de algunos placeres, un rico helado, sin tener sensibilidad, por ejemplo.
Hoy en día, la tecnología permite ofrecer soluciones eficaces, menos invasivas y más cómodas:
- Fototerapia: la luz terapéutica aplicada a la cavidad oral ayuda a reducir inflamación, dolor y acelerar la cicatrización. Es especialmente útil en personas mayores con encías delicadas o aftas frecuentes.
- Escáneres intraorales e impresiones 3D: reemplazan las molestas pastas tradicionales para tomar moldes. Con escaneo digital, se obtienen modelos exactos de la boca en segundos, permitiendo diseñar prótesis o restauraciones con alta precisión y sin incomodidad.
- Prótesis impresas en 3D y rehabilitaciones inmediatas: permiten recuperar piezas dentales en menos tiempo, con ajustes personalizados y estética mejorada.
- Diagnósticos digitales: radiografías más rápidas, precisas y con menor exposición a radiación.
Una buena alimentación no solo favorece la salud general, sino también la oral. Se recomienda:
- Evitar alimentos muy duros o pegajosos si hay prótesis o sensibilidad.
- Priorizar frutas, vegetales, proteínas blandas, y alimentos ricos en calcio y vitamina D. Es importante, ante la presencia de alguna condición sistémica seguir las indicaciones de su médico y/ o nutricionista. Esto es muy común por ejemplo en pacientes diabéticos, cardiopatías entre otros.
- Mantener buena hidratación para estimular la saliva.
La salud oral no tiene edad. Gracias a los avances tecnológicos y las facilidades disponibles, hoy es posible conservar los dientes naturales o reponerlos de forma funcional y estética, incluso ante limitaciones propias del envejecimiento. Una boca sana en la vejez permite alimentarse bien, sonreír sin complejos y vivir con dignidad y bienestar.
¡Con prevención, atención profesional y compromiso personal y familiar la sonrisa dura toda la vida!